Soy una mamá muy friki y lo disfruto

Pronto cumpliré 5 años de ser mamá y puedo decir que caracterizarme de Leia con mis roles en la cabeza para una fiesta de princesas o usar mis playeras madre e hija de Wonder Woman es de lo más divertido que puedo ofrecer a mi hija. 

Ella disfruta al usar disfraces y tiene un gusto por los juguetes de la colección de su papá; ambos juegan con los barcos vikingos de Playmobil o desempacan juntos un juguete nunca antes abierto, y yo le he dejado todos mis plush de Star Wars para que compartan una buena tarde de té con Peppa pig. Soy de las mamis que compran pijamas de Superman y que organiza fiestas con temas frikis, y que más allá de inculcar el valor del respeto por los gustos de los demás, intento abrir la mente de mi hija por tener gustos variados, culturalmente hablando. 

Y puedo decir con orgullo que no somos pocas las mamás que nos hemos encontrado cómodas dentro de este mundo; entrevistandolas me doy cuenta que vamos en aumento las mujeres que nos damos cuenta lo mucho que podemos compartir con nuestros hijos y la diversión que trae consigo. 

Alguna de ellas me comentaba lo feliz que le hace disfrazar a su pequeña hija de Lady Vader y acompañarla caracterizada de Ahsoka Tano y no solo por complacerla, sino por compartir la experiencia de asistir a una convención friki, reír a su lado, tomarse fotos y lucirlas con orgullo. 

Algunas amigas más saben ahora quienes son los Avengers, los llevan a ver la película, regalan los juguetes y lo mejor de todo, es que ahora ya pueden tener dialogos en un juego con ellos y no como las mamis de antes que poco o nulo conocimiento tenian de los superheroes y sus hazañas. Un amigo me comentaba que su hijo es un pequeño conocedor del mundo friki y que obviamente es porque él como papá lo ha sumergido en el gusto, algo que nunca logró con su esposa, quien ahora también se interesó por el hecho de compartir gustos con el pequeño. 

Y así como ahora han aumentado los personajes femeninos y se habla de ellos en los medios, tambien va incrementando el nivel de frikes en las mujeres en bien de los hijos, esposos, amigos y en el nuestro por principio de cuentas. 

Me dice una amiga que seguramente mi hija crecerá y no le gustará esto, tal vez suceda así, ya crecerá tanto como para decidir si sigue por el camino friki o no, pero por lo pronto mi responsabilidad es que lo disfrute mientras viva en él junto a su papá y a mí, su friki mommy.