jueves, 8 de septiembre de 2016

Mi muñeca de papel, Magic Mindy

Ayer buscando una tarea para mi hija encontré una imagen llena de recuerdos que me transportaron a la tarde en que mi mamá me regaló Magic Mindy, un libro donde podíamos recortar a la muñeca y todo su guardarropa; era lo máximo, traía pijamas, capas, gorros y vestidos que me encantaban, aún me gustaría tenerla y vestirla de nuevo, era un verdadero placer. Tenía otras varias, era fan de ellas y las disfrutaba mucho más que a una Barbie, de la que no era seguidora. Mi gusto por recortar cada vestido y accesorio era tanto, que las llevaba conmigo a donde fuera y por eso Mindy era mi favorita porque traía su bolsita armable de cartón donde guardabas todo.





Buscando la historia de estas muñecas para recortar he encontrado varias, una de ellas menciona que se comenzaron a imprimir en Europa, y era con fines didácticos, ya que mostraban como debía vestirse una dama de sociedad y la acompañaban con textos que te decían el modo de comportarse. Otra historia más dice que aparecieron en Francia y eran llamadas Papins, pero eran más como marionetas y satirizaban a la alta sociedad y los trajes utilizados eran un reflejo de la moda de la época.
 

Su historia en México es que les llamaban Cuquitas, por el personaje de comics norteamericano llamado Tillie the Toiler que publicaban en el periódico junto a una paper doll; aquí lo tradujeron como Cuquita, la mecanógrafa, y se hicieron tan populares que varios diseñadores de modas hacían las suyas para que aparecieran en las revistas.


Yo recuerdo que tenía a puras niñas con vestiditos y otras que traían trajes típicos y accesorios de oficios considerados solo para mujeres, pero dudo que en aquel entonces me importaran esos prejuicios. Solo eran muñecas bonitas y jugaba sin más. Recuerdo también tener a Wonder Woman y era lo máximo.




Nunca tuve una de las bellezas que fabricaban en Inglaterra, pero tampoco es que las necesitara porque tenía mis niñas y mis super héroes todas ellas mujeres porque por hombres o niños no recuerdo si tuve. Veo que allá tenían a Lady Diana, ídolo de ese país y algunos de sus libros para recortar si incluyen al principe Carlos. Yo me quedaría feliz solo con Diana y sus multiples vestidos y accesorios o con gusto recibiría la que tiene al principe William con todo y sus juguetes y personajes de quienes lo visitaban, que la verdad está divertido.



Tantos y tantos modelos que existen y tan genial la pasamos en nuestra infancia que por supuesto he intentado que le interesen a mi hija, y hasta hoy no lo he logrado. Las de ahora ya vienen con ropa autoadherible y escenarios; hay de personajes famosos  y muchas cosas más, pero ni así logro que se siente un rato a recortar y vestir muñecos conmigo, lo volveré a intentar varias veces más. 

Yo aún las compro, y ahora es mejor porque tengo a la Princesa Leia, a Marty McFly, y hasta a Thor. Es mi modo muy personal de disfrutar de trajes que tal vez nunca tendré. Y bueno, también tengo a mi muñequita de carne y hueso a la que me encanta vestir tanto como hace años disfruté de Magic Mindy, y la mía es aún más hermosa. 

jueves, 1 de septiembre de 2016

Hablemos de Star Trek


Mañana se estrena Star Trek, Sin Límites, la nueva película de una saga que cuenta con un sin número de fans y que cumple cinco décadas desde su estreno. Puedo decirles que después de sus 13 películas y 6 series de televisión, la siempre impresionante Enterprise sigue en el espacio, la frontera final, en una misión en busca de nuevos mundos, nuevas vidas, nuevas civilizaciones y tratando de alcanzar lugares a donde nadie ha podido llegar. Si son fans de la saga la disfrutarán enormemente y si no lo son les digo que será entretenida, y con la cantidad de acción para resultar divertida. Se las recomiendo si les gustan las naves, y los personajes multiculturales que conviven en armonia, por lo menos dentro de la Federación que es una especie de ONU intergaláctica. La van a disfrutar tanto como yo, aunque no sepan mucho de la saga.

Yo vi pocos capítulos de la serie original, pero de algún modo en mi cultura general friki se encontraban los nombres de Kirk y Spock y sabía que eran grandes amigos que viajaban en la Enterprise, y no más. Estos datos pueden ser o no útiles si quieren ver esta nueva cinta, que es la tercera de esta nueva era de reboot de la famosa saga.

Star Trek es atractiva para hombres y mujeres por el hecho de unir y respetar el trabajo de cada quien dentro de la propia nave y el modo en que son compañeros que se ayudan en circunstancias adversas en planetas en los que lo mismo pueden encontrar amigos que enemigos. Sus aventuras espaciales mezclan de un modo armonioso lo mismo humanos, que personajes de otros mundos sin distinciones de género y denotan que las capacidades de todos son tomadas en cuenta.

La primera serie data del año 1966 y nos presenta a la teniente Uhura, la primera mujer de raza negra en obtener un papel de relevancia lejos de los comunes en aquel entonces junto a otros personajes igual de entrañables como lo son Spock, Kirk, Sulu, Bones y otros más.

Para los fans también nos es atractivo el uso de la tecnología que en aquel lejano año era impensable y hoy es retomada como una realidad; desde aquella serie era importante cada detalle en el uso del color de trajes llamativos que cambian dependiendo del cargo que tengan en la Enterprise. Y la ambientación de los planetas en los que se mueven junto a los personajes intergalácticos.

Es una saga por demás interesante y el modo en que ahora es llevada a la pantalla es bastante atractivo para las nuevas generaciones que podrán disfrutar de naves y batallas en el espacio sin que sea nada parecido a lo que nos pueda presentar Star Wars porque todo es tan diferente entre sí que existen fans de ambas sagas que logran convivir en total armonia.

Entrevistando a mis amigos fans de Star Trek preguntaba por mera curiosidad, ¿qué tantas friki mommy hay en la saga? Ya que al ser muy intergaláctico cada tema, los sentimientos de paternidad y maternidad quedan de lado y en realidad tampoco es que hagan falta, pero les daré un par de datos acerca de cómo es tratado el tema en estas últimas cintas.

En esta tercera entrega de Star Trek, Sin Límites, no vemos nada con relación a maternidad, y de hecho es un tema que en toda la saga se menciona poco; en la película del 2009 Star Trek, Un Nuevo Comienzo, es donde mayormente vemos un poco de sentimientos maternos, en especial de uno de los personajes protagonicos, me refiero a Spock, personaje nacido de la unión entre vulcano y humana; su madre le da ese toque de ternura que lo caracteriza en las actuales cintas. Él ama a su madre y la defiende en todo momento y es ella quien ha forjado su carácter y lo ayuda. Este personaje es quien mejor nos presenta esa relación madre e hijo que sólo vemos en la primera película de las nuevas entregas.

También podemos mencionar a la mamá del capitán Kirk, que aparece en las primeras escenas de esa misma cinta del año 2009, donde la vemos dando a luz al pequeño mientras su esposo está salvando a toda la tripulación de su nave, sacrificandose a sí mismo en un acto heróico. Después cuando crece Kirk no sabemos de ella hasta esta tercera película en el que es mencionada en una pequeña frase por uno de sus amigos; esto es lo que funciona muy bien en la saga y no se espera que nos la presenten de nuevo para que el capitan del Enterprise tenga escenas madre e hijo como si ocurre con Spock y su mamá.

En la serie original poco se enfocan en temas así, aunque si se tratan en algunos capítulos. Y creo que esa diferencia es básica con Star Wars ya que allá es tema común y sabemos quienes son padres de quien, madres y hasta abuelos. Acá no, y es tan irrelevante que nos podemos sentar a disfrutar de las aventuras de la Enterprise sin pensar en más que en la teletransportación y salir de ahí a la velocidad warp.

Disfruten pues de esta nueva entrega y que tengan larga y prospera vida.